LA MASACRE DE RWANDA: 25 AÑOS DE UNO DE LOS PEORES GENOCIDIOS MODERNOS
El mes de abril de 1994, fue uno de los más trágicos hechos para la república africana de Rwanda. Los primeros días del mes, el Presidente, Juvénal Habyarimana, murió al ser derribado por un misil el avión en el que viajaba antes de aterrizar en Kigali. Ese atentado ocasionó un genocidio en el que murieron unas 800.000 personas, asesinadas de las formas más sangrientas y prácticamente ante las cámaras de televisión de todo el mundo. La experiencia sirvió de fuente de inspiración para muchas películas, como “Hotel Rwanda”, «Le di la mando al diablo» (Foto) y “Shooting Dogs”, en las que el papel de los Cascos Azules de las Naciones Unidas fue severamente cuestionado.
Los 10 momentos clave de la matanza impulsada por la mayoritaria etnia hutu contra la minoritaria tutsi son los siguientes:
6 de abril de 1994: El avión que transporta a Habyarimana y su homólogo de Burundi, Cyprien Ntaryamira, ambos hutus, es abatido y mueren los dos. Los extremistas hutus acusan del asesinato al rebelde y tutsi Frente Patriótico Ruandés (RPF), con el que el Gobierno ha negociado los Acuerdos de Arusha para acabar con la guerra civil. El RPF, a su vez, acusa a esos radicales del ataque al asegurar que buscaban una excusa para iniciar la matanza. Ese día, surgen los primeros brotes de violencia en Kigali.
7 de abril de 1994: La primera ministra de Ruanda, la hutu moderada Agathe Uwiligiyimana, es asesinada por las Fuerzas Armadas ruandesas, que también matan a diez soldados belgas de la Misión de la ONU en Ruanda (UNAMIR), encargados de proteger a la mandataria. Empieza una campaña, puerta a puerta, para matar a miles de personas. Al día siguiente, el RPF, liderado por el futuro presidente Paul Kagame, lanza una ofensiva para frenar el genocidio.
9 de abril de 1994: En la masacre de Gikondo, en Kigali, son asesinados más de cien tutsis (incluidos niños) refugiados en una iglesia católica. Sus ejecutores son miembros de la milicia hutu Interahamwe, bajo supervisión de la guardia presidencial.
18 de abril de 1994: En la masacre de la ciudad de Kibuye (noroeste), unos 12,000 tutsis mueren asesinados tras buscar refugio en el estadio de Gatwaro y ser rodeados por soldados de la Gendarmería Nacional de Rwanda, policías e integrantes de Interahamwe.
21 de abril de 1994: Tras la muerte de los “cascos azules” belgas, el Consejo de Seguridad de la ONU aprueba la retirada de sus tropas y reduce los efectivos de su Misión de Paz en Ruanda de 2,500 a unos 250.
28-30 de abril de 1994: Decenas de miles de refugiados, la mayoría hutus que temen el avance del RPF, comienzan a huir hacia países vecinos como Tanzania, Burundi y Zaire (actual República Democrática del Congo). Esas imágenes dan la vuelta al mundo, aunque muchos malinterpretan que se trata de víctimas del genocidio.
17 al 30 de junio de 1994: Los tutsis que vivían alrededor de las colinas de Bisesero (noroeste) se refugiaron en ellas y aguantan ante los asesinos, sus vecinos hutus. Tras varios días de resistencia, llegan refuerzos del régimen de Kigali y milicias, que matan cerca de 50,000 tutsis.
22 de junio de 1994: El Consejo de Seguridad de la ONU adopta una resolución para activar la “Operación Turquesa” con el fin de establecer y mantener una zona de protección humanitaria en el suroeste del país. Está liderada por Francia, que aporta más de 2,000 soldados.
4 de julio de 1994: El RPF derrota a las tropas gubernamentales en Kigali y en días sucesivos, se hace con el control del resto del país hasta poner fin al genocidio. En las represalias del RPF, mueren miles de personas, mientras cientos de miles de refugiados cruzan a Zaire.
19 de julio de 1994: Investidura de un gobierno de unidad nacional encabezado por el presidente Pasteur Bizimungu (hutu), en el que Kagame ocupa el cargo de vicepresidente.
Actualidad
A 25 años de este genocidio, el actual presidente de Rwanda, Paul Kagame, decretó 100 días de luto. El hecho está calificado como el genocidio más grande que haya habido en el país. Sin embargo, el 60% de la población no vivió el genocidio, en que aproximadamente 800.000 personas de todas las edades fueron exterminadas.
FUENTE: Diarios internacionales